Sésamo

Precaliente el horno a 325 grados F.

Espolvoree las semillas de sésamo en una bandeja para hornear grande y hornee durante unos 20 minutos o hasta que estén doradas, revolviendo ocasionalmente. Deja enfriar.

Cubre la bandeja para hornear galletas con papel pergamino.

Con una batidora eléctrica, bate la pasta de almendras y el azúcar hasta que solo queden pedazos muy pequeños de la pasta. Separe los huevos y agregue las claras de huevo y mezcle a alta velocidad hasta que la mezcla esté suave. Mezcle las semillas de sésamo.

Deje caer por cucharaditas redondeadas en una bandeja para hornear preparada, con una separación de 2 pulgadas. Hornee durante unos 14 minutos o hasta que las galletas estén hinchadas, doradas pálidas y los bordes comiencen a dorarse.

Transfiera las galletas del papel pergamino a una rejilla y enfríe completamente. Retire con cuidado las galletas del papel pergamino.